¿Qué está pasando?

CARCEL DE TEIXEIRO. PEDRO EXCUDERO
SALUD MENTAL EN PRISIÓN
SALUD MENTAL EN PRISIÓN
PATOLOGÍA DE CARCELES DUALES EN LAS
PROTOCOLO SUICIDIO
MODELO PENITENCIARIO NUEVO VASCO

DATOS SOBRE SUICIDIOS

DEFICIENCIAS SANITARIAS I
DEFICIENCIAS SANITARIAS II
DEFICIENCIAS SANITARIAS III
MUERTES EN CÁRCELES DE PAIS VASCO
AISLAMENTO
INSLAMIENTO
ATENCIÓN MÉDICA EN PRISIÓN
ATENCIÓN MÉDICA EN PRISIÓN
MUERTES EN CARCELES CATALUÑA
MUERTES EN CARCELES CATALUÑA
MUERTES EN CARCELES DE CATALUÑA II
MUERTES EN CARCELES DE CATALUÑA II
MUERTES EN CARCELES DE CATALUÑA III
MUERTES EN CARCELES DE CATALUÑA III
MUERTES EN CARCELES DE CATALUÑA IV
MUERTES EN CARCELES DE CATALUÑA IV
CARCEL DE LA MORALEJA. DAVID ROJAS
CARCEL DE PUIG DE LES BASSES. MANUEL NOGUERA «LOLO»
CARCEL DE ZUERA. ALFONSO MIGUEL CODÓN
VULNERACIÓN DE DERECHOS. PLAZAS DE PERSONAL MÉDICO
VULNERACIÓN DE DERECHOS. CONDICIONES CELDAS
VULNERACIÓN DE DERECHOS. CONDICIONES CELDAS
VULNERACIÓN DE DERECHOS. CONDICIONES CELDAS
VULNERACIÓN DE DERECHOS. ATENCIÓN MÉDICA
VULNERACIÓN DE DERECHOS. ATENCIÓN MÉDICA
VULNERACIÓN DE DERECHOS. MÉDICA FALTA PERSONAL
VULNERACIÓN DE DERECHOS. MÉDICA FALTA PERSONAL
VULNERACIÓN DE DERECHOS. MUERTES
SALUD MENTAL Y PSIQUIATRÍA
VULNERACIÓN DE DERECHOS. COMPETENCIAS DE TRANSPASO

TESTIMONIO DE GABRIEL POMBO DA SILVA

 

La cárcel es un lugar absolutamente insano y degradante para cualquier animal (incluido el ser humano). La cárcel es la peor criatura y la execrencia autoritaria y criminal del Estado.

«Salud y prisión» o «la salud en prisión» son conceptos absolutamente antagónicos entre sí … El preso sólo puede constatar cómo se ha convertido en un sujeto privado de su derecho natural a los cuidados y la salud. El preso sobrevive no gracias al «sistema de salud» (que es inexistente o minimalista) sino a su propia capacidad orgánica y mental. En todas estas décadas en prisión jamás recurrí a la «sanidad» de la prisión. El cuerpo médico en I.I.P.P. (Instituciones Penitenciarias) es deficiente y reaccionario; es dependiente del criterio de la Institución Carcelaria y ajeno a los nobles principios de la deontología médica.

Zamora, 13 de septiembre de 1988: todos los menores del Departamento de Aislamiento en Primer Grado somos apaleados y torturados por carceleros e incluso un médico con porra en ristre.

Marzo de 1996: tras un intento de evasión de la cárcel de Málaga vuelvo a ser torturado y no atendido por el servicio médico de prisión.

La «protesta», como el «interrogatorio» o la fuga, siempre tienen y han tenido un asesor médico para corroborar las tesis que sostienen las instituciones carcelarias o policiales (incluso CIEs, centros de menores etc.). Estos son solo dos ejemplos, a los que se suma la función blanqueadora de los crímenes legales que cometen en prisión, metiéndose en la política de los equipos de tratamiento ignorando, impidiendo, retrasando u omitiendo las excarcelaciones de los enfermos incurables, de los enfermos mentales, de los toxicómanos. Así se les impide una muerte digna y en libertad, un tratamiento digno y adecuado…

Y si la ley no es igual en la calle, menos aún lo es en la cárcel. Por eso, si eres un rebelde, un preso político o con conciencia morirás con toda probabilidad en la cárcel, porque lo dicta el “Equipo de Tratamiento” y lo corrobora el “Equipo Médico” con el beneplácito de la sociedad entera y la mierda de su sistema.

Es sabido que, en última instancia, a los presos moribundos se les saca a morir a un hospital externo para menguar las estadísticas de las muertes en prisión.

Puedo con absoluta rotundidad afirmar que en prisión no existe una “Sanidad Pública” que trate y diagnostique la enfermedad. Diría incluso más: la cárcel provoca muerte, locura, drogadicciones y desatenciones de todo tipo y condición. Me consta que con este “diagnóstico” mío no contribuyo a buscar “soluciones” prácticas para quienes creen que la cárcel podría “humanizarse” al menos en lo básico: la salud, la educación, el respeto a los derechos humanos.

El motivo por el que hoy no me encuentro ahí entre vosotros hablando sobre este tema es, precisamente, por los “daños colaterales” del sistema médico-carcelario que, desde que he salido hasta ahora, estoy tratando. Para cuando esté sanado estaría encantado de participar con individuos y colectivos que de verdad luchen por este tema.

Por un mundo sin prisiones…

y abajo los muros

Gabriel Pombo da Silva